Hemos oído miles de veces que para crecer, debemos mirar más allá del típico horizonte de planificación a corto plazo, y convertir los desafíos emergentes en oportunidades. ¡Quizás este sea el momento de empezar! Porque todo está de tu lado.
Los consumidores exigen a las marcas que redefinan o actualicen su posicionamiento y propuestas de valor, más allá del (necesario) beneficio económico. Y solamente las marcas que lo hagan van a sobrevivir en un futuro cercano.
También nuestro planeta (y quienes vivimos en él) dependemos de que se tomen las decisiones correctas en los próximos años, y todos somos responsables. Los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas) pueden ser nuestra brújula. Ya que son un marco de 17 puntos diseñados para motivar esfuerzos públicos y privados hacia metas muy ambiciosas y así, entre todos generar un gran círculo virtuoso. ¿Suena bien no? ¿Ya estas entendiendo por donde va mi propuesta?
Purpose: how you use your experiences, talents, and passions to better the lives of those around you (L. Peterson).
Propósito
Pensando alrededor de la palabra “propósito”, he encontrado esta definición de Lindsay Peterson que realmente me gusta mucho. Ella dice que nuestro propósito es la manera de utilizar todo nuestro potencial, lo que mejor sabemos hacer, nuestra pasión y talento, para ayudar a mejorar la vida de las personas. Y como vimos, esto es muy necesario en el contexto actual.
De la sostenibilidad a la regeneración.
Debemos aprovechar estos cambios masivos que venimos viviendo y dejar de hablar de sostenibilidad, ya que es un tema muy trillado y carente de significado (sobre todo en el mundo del beauty) y empezar a hablar de regeneración, que es un concepto mucho más inspirador y con futuro. Hoy todo necesita regenerarse. El ecosistema, la economía, las sociedades, las ciudades, las empresas, nuestro cuerpo, etc.
Y para lograr esta regeneración, el sector privado es clave y puede ayudar a resolver los principales retos de la humanidad: como la crisis climática, la desigualdad económica, de género, etc. Por lo tanto, debemos tomar las decisiones teniendo en cuenta cual será nuestro impacto social y/o medioambiental, y según varios expertos, esto supone un cambio de paradigma tan grande que se asemeja al de la digitalización o la industrialización del SXX.
Propósitos para el 2022
Con este prólogo espero haberte motivado a ampliar el horizonte de tus propósitos. Mi misión es ayudarte a organizar tus ideas, con 5 consejos simples, para descubrir tus nuevos propósitos, priorizarlos y comprometerte a cumplirlos en el tiempo. Empecemos.
- Establece aquello que realmente quieres conseguir
Muchas veces, los directivos nos dejamos llevar por los mercados y las tendencias a la hora de establecer nuestras metas. Pasamos semanas analizando reports, la prensa, redes sociales, la competencia, etc. Esto está muy bien, porque nos da mucha cantidad de datos, pero para encontrar “ese gran propósito” esta vez tienes que ser más introspectivo, ya que nadie sabe como tú sabe lo que tu empresa necesita de verdad. Tómate el tiempo necesario para escribir una gran lista y ver lo que realmente te apasionaría conseguir como persona, directivo y empresa.
- Incluye grandes proyectos en los que te quieras embarcar
Piensa a lo grande. Que cosas te motivan a ti mismo, esos objetivos que te generan ganas para seguir avanzando.
Pero cuidado, crear una lista con metas que nunca vas a cumplir es una gran pérdida de tiempo, además de una gran decepción al final del año. Por eso tienes que ser honesto con lo que puedes y no puedes abarcar. Estudia bien que necesitas para llevarlas a cabo, y si son compatibles con todas las demás responsabilidades que cumples en tu día a día. Elige bien las batallas que quieres luchar este año, y ve a por ellas.
- Crea una lista y pon el foco
Seguramente ya tienes un montón de temas que quieres abarcar, ahora toca priorizarlos. Pero priorizar no es juntar la lista de deseos de cada uno de los departamentos. Eso no es priorizar: eso es evitar priorizar. Debes enfocar. Y poner foco no es decidir qué hacer y qué no. Poner foco es decidir qué quieres conseguir y qué no.
Quizás te ayude analizar que objetivos te ayudan a tener un mayor impacto social y/o medioambiental, o pensar en las futuras formas de implementar estas acciones desde la óptica del entretenimiento, ya que los consumidores necesitan evadirse, divertirse del mundo actual. Tus ideas: ¿Funcionarían en el Metaverso y la Web3?
Piensa cuál de tus metas serán más potentes de comunicar y realizar.
- Crea un plan para cumplir esos propósitos
Para que algo funcione necesitamos un plan. Puede ser algo pequeño, o un súper plan estilo “la Casa de Papel”. Por ejemplo, si uno de tus propósitos es conseguir una línea de packaging más sostenibles, tienes que pensar en qué vas a necesitar para que eso suceda, cuáles serán los próximos pasos para alcanzar esa meta. Y seguramente contratar una buena agencia especializada sea uno de los primeros pasos para conseguir ese objetivo.
También tendríamos que valorar la viabilidad del proyecto. Muchas veces las empresas decimos que no tenemos recursos para llevar a cabo las ideas, pero realmente lo que no hemos decidido es que dejar de hacer. También haz una lista con ello.
No tenemos recursos = No hemos decidido qué dejar de hacer.
- Comprométete con tus propósitos
Cómo en tus proyectos personales, si no hay compromiso, no hay avances. Mantener el compromiso al principio es fácil, pero puede resultar muy difícil cuando nos sumergimos en el día a día. Crear un sistema para revisar y actualizar tus propósitos periódicamente, puede ser una herramienta fundamental para no dejarlos abandonados dentro de un océano de urgencias.
También es muy importante tomar el tiempo necesario para volver a comprometerte periódicamente con estas metas y sacar el máximo partido de ellas.
- Crea una estrategia sólida a largo plazo
Ya tienes la lista definitiva de tus propósitos, tienes un plan y estás totalmente comprometid@ con él. Ahora llega el momento de implementarla y consolidarla.
#DesignABetterFuture
