Nombre, cargo y empresa.
Anna Escribano, CEO en Rafesa.
¿Cuál es su historia y valor diferencial en el sector de la belleza?
Nuestra historia arranca hace 40 años de la mano de mi padre, Rafael Escribano Noverques. Desde el inicio nuestra misión ha sido ofrecer soluciones de packaging innovadoras para el sector de la perfumería y cosmética y, debido a la necesidad cada vez más urgente de ser respetuoso con el medio ambiente, desde hace ya unos años intentamos que nuestras propuestas además atractivas e innovadoras sean también sostenibles.
Nuestro valor diferencial no lo situaría en el “qué” hacemos y “cómo” lo hacemos sino en el “por qué” lo hacemos. Mi padre creó la empresa para acompañar a personas que querían montar sus propias líneas de cosmética o de perfume y necesitaban un packaging novedoso sin verse obligados a soportar unos mínimos de compra elevados.
Hoy en día nuestra esencia es la misma: escuchar, identificar las necesidades, acompañar, ofrecer el expertise que hemos adquirido a lo largo de estos años y ponerlo al servicio de nuestros clientes para que su experiencia con el mundo del envase sea fácil.
¿Qué implica tu día a día en la empresa?
Me siento muy afortunada de contar con un equipo experto, cohesionado y comprometido que trabaja con entusiasmo por consolidar nuestra presencia en el sector. Eso me permite centrar mi día a día en acompañarlos, motivarlos y en hacer el ejercicio de traer el futuro al presente para así diseñar y planificar los próximos pasos a dar que nos permitan ser una empresa de referencia en el sector del packaging.
¿En la situación actual, estáis apostando por la transformación digital?
Sí, por supuesto. Debo decir que siempre hemos tenido muy presente que no se puede obviar o vivir al margen de los avances tecnológicos. Esto pudimos constatarlo cuando nos vimos sorprendidos por la pandemia. Al día siguiente de activarse el estado de alarma pudimos trabajar en remoto desde nuestras casas sin ningún tipo de problema.
La pandemia ha ocasionado una revolución digital que no se frenará cuando esta finalice sino todo lo contrario: su desarrollo será exponencial y no habrá vuelta atrás. Para estar siempre en la vanguardia de la tecnología, en 2021 RAFESA implantó con éxito un nuevo software y este año que acabamos de estrenar tenemos el propósito de lanzar un catálogo digital.
¿Crees que la sostenibilidad es una tendencia o una realidad ineludible?
No niego que, al principio, muy al principio, fuera visto por muchos como una tendencia o incluso como un argumento de venta. Pero la verdad es que no tardamos nada en darnos cuenta de que esto no era una moda. Estudios científicos han puesto de manifiesto que las alteraciones climáticas que sufre el planeta no tienen precedente. Se han vivido olas de calor, precipitaciones violentas, sequías, ciclones, etc. que ponen de manifiesto que algo está ocurriendo y que debemos actuar porque de lo contrario algunos cambios serán irreversibles. Es urgente y necesario tomar conciencia de la situación, liderar esta transformación de manera activa siendo protagonistas, cambiando de mentalidad y actuando colectivamente para conseguir una mayor disrupción.
¿Qué retos afronta el sector en los próximos años?
En primer lugar, la búsqueda del bienestar cobra un papel relevante para todos los usuarios del sector ya que la pandemia nos ha afectado tanto a nivel físico, mental como a nivel emocional y es necesario tratar de poner el foco en lo que hace sentir bien a las personas.
En segundo lugar, la sostenibilidad. Considero que las empresas deberíamos incluir en nuestro plan estratégico un apartado en el que se detallara un plan de acción con las actuaciones que se van a realizar o se van a desactivar para ser más respetuosos con el medio ambiente.
Y, por último, pero no por ello menos importante, la digitalización. Toca adaptarse a las nuevas tecnologías porque el no hacerlo es quedarse fuera del mapa.
¿Cómo atraer talento y retenerlo en una época tan compleja?
No es fácil atraer y retener el talento en esta época convulsa que estamos viviendo.
Considero que es momento de poner en valor la inteligencia emocional, la marca personal, las competencias comunicativas y digitales, pero sobretodo priorizar el bienestar propio y social.
¿Qué os aporta formar parte del Beauty Cluster como entidad?
Es una entidad sólida liderada por grandes profesionales que crean un espacio abierto para interactuar y generar networking en el sector de la perfumería y cosmética.
Formar parte del clúster nos ayuda a estar presentes y conectados a todos los avances en los que está inmerso este cautivante sector que siempre está en continuo movimiento.
¿Cómo aterrizas en el sector de la belleza?
Llegué siguiendo los pasos de mi padre. Al principio no imaginé que ese iba a ser mi destino final, pero no tardé en sucumbir a los encantos de este apasionante e interesante sector.
A lo largo de mi carrera profesional siempre he estado vinculada al mundo de la cosmética y la perfumería y solo tengo palabras de agradecimiento para todos los profesionales que he tenido el placer de conocer o de colaborar con ellos y que me han ayudado a crecer tanto a nivel personal como profesional.
¿Hablando de belleza cómo la definirías?
Para mí es una apreciación subjetiva de lo hermoso, de lo bello, de lo atractivo, de lo deseable. Para los clásicos la belleza es el esplendor de la forma y esta definición me encanta trasladándola al mundo del packaging cosmético.
¿Algún hobby, súper poder o pasión escondida que quieras compartir?
Disfruto de cosas sencillas como caminar, leer, viajar. Pero lo que más me gusta es compartir buenos momentos con familia y amigos. Desde pequeña me interesé por la cocina y me gusta buscar recetas para deleitar a mi familia. Me gustaría compartir una cita que leí de Confucio que me hizo pensar: “Tenemos dos vidas, la segunda empieza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una”.
¿Cuál es el último libro que has leído o película que has visto?
Me gusta leer por ocio y también para seguir formándome por lo que suelo manejar dos libros a la vez. Acabo de leer la última novela de Arturo Pérez-Reverte, “El Italiano”, una historia de amor y guerra que pone de manifiesto una serie de valores y virtudes que invitan a la reflexión.
Durante estas fiestas navideñas he finalizado el libro de Fabián Villena “Despliega tu actitud positiva inteligente”. A Fabián he tenido el placer de saludarlo personalmente y me ha encantado su manera cálida, sencilla y directa de ofrecer una serie de herramientas para vivir felizmente la vida personal y profesional.
Los negocios se basan en….
Los negocios son relaciones humanas y para mi estas relaciones deben estar basadas en la confianza. Un negocio no es negocio si todas las partes implicadas no salen ganando. Así pues, para mí los negocios se basan en un win-win. No se trata solamente de ganar dinero, también es necesario aportar algo a la sociedad, y que esta te “recompense” por ello.
Todos los actores (empresarios, trabajadores, clientes, colaboradores…) deben salir ganando, no solo en un aspecto económico, sino que también debe haber un componente humano de felicidad y bienestar general.